viernes, 26 de septiembre de 2014



No apto para vegetarianos


El desayuno ideal que deseo tener este próximo viernes es un riquísimo nacatamal acompañado con pan suave y un cafecito caliente.
A muchos nos gusta comer sabroso, pero a veces se nos antoja un nacatamal calientito - uno de los platillos  típicos  propios del Nicaragüense- un día miércoles ¿te ha pasado?…y tienes que esperar a que sea viernes, sábado o domingo para poder quitarte el antojo, a como decimos popularmente, por eso te brindamos  la receta  sencilla para aprender hacerlo.
Así se hace el nacatamal:
  • Se prepara la masa de maíz con agua tibia, el jugo de una naranja agria y la manteca de cerdo; se amasa hasta que quede con una consistencia intermedia suave y se le agrega sal al gusto. (Ni dura ni aguada). Moldeable.
  • El cerdo se prepara con sal, naranja agria, un poco de pimienta negra, achiote o pimentón español; un poco de cebolla rayada y ajo martajado.
  • Una vez que la masa esté suave; se arman los nacatamales poniendo dos mitades de hojas de plátano so-asadas previamente para que pueden manipularse en el centro coloca: la masa de maíz, carne de cerdo y costilla, un poco de arroz, chiltóma (pimiento dulce), cebolla, tomate, papa, ajo, sal, una ramita de yerbabuena  o chile si prefieres.
  • Cuando todo esta masa ya cargada con todos los ingredientes; se amarran bien los nacatamales con un mecate fino o sondaleza; amarra bien para que el agua no dañe la masa.
  • Amarrados los nacatamales se ponen a hervir en una olla a fuego medio bajo de carbón o leña por unas 4 o 5 horas hasta que estén suaves y gustosos.
Una prueba del mestizaje
Este platillo típico tiene sus raíces en el tamal, elemento primordial en la vida de todos los pueblos precolombinos que giraban alrededor del maíz y  nació cuando los indígenas trataron de preservar sus alimentos envolviéndolos en hojas. 
De esta forma, al envolver una masa de maíz en hojas de la misma especie y cocinada al vapor, lograron preservarlo por un buen tiempo y de este principio nació el tamal y consecuentemente el nacatamal.

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